Aquí os presento una deliciosas alcachofas, me encantan porque son muy porque son sanas, ricas, tienen buen precio, en fin son maravillosas!!! De cualquier manera como las hagas, ya sea simplemente hervidas con una vinagreta o escabechadas, al horno, guisadas, en crema están buenísimas!!
Primero pela las alcachofas , quítale las hojas externas hasta que llegues a las hojas amarillas, luego pela el tallo y pícalas en dos mitades. Para que no se ennegrezcan ponlas en un bol con agua fría, unos cubitos de hielo y un puñado de ramitas de perejil. Y un dato que he aprendido leyendo la receta que el perejil es rico en luteína, un pigmento antioxidante que ayuda a que no se oxiden tanto y conserve el color. Una vez hayas terminado de pelarlas y estén limpias, sécalas y reboza en harina especial para freír, puedes salar un poco. Fríelas en aceite de oliva virgen extra, saca y escurre un poco sobre papel de cocina.
El aceite que has usado para freír guárdalo para otras preparaciones o deséchalo. En la misma sartén que has vaciado del aceite que acabas de usar o en otra olla pon 100 ml. de aceite. Rehoga primero las hojas de laurel, los granos de pimienta y la cabeza de ajo para que el aceite se impregne de este sabor. No dejes que se frían demasiado las hojas de laurel y colócalas en la cazuela donde están las alcachofas para que no se frían demasiado.
Ahora agrega las verduras que has picado previamente y luego las alcachofas rebozadas. Cubrimos con la mezcla de vino, agua y vinagre a partes iguales, sin quedarse cortos. Si no te gusta el escabeche muy fuerte, echa solo la mitad de la medida de vinagre. Añade la sal y deja cocinando unos 30 minutos. Revuelve de vez en cuando para que la harina suelte y espese. Rectifica la sal si es necesario. Puedes poner las hierbas aromáticas cuando quieras, en este caso el tomillo limonero y la ralladura de piel de naranja se lo agregué como 15 minutos después que lo puse a cocinar.
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Me encanta