Dejar el bacalao en remojo durante 24 horas cambiándole el agua tres veces. Limpiarlo de pieles y espinas y desmenuzarlo.
Cocer las patatas, hacerlas puré y mezclarlas con el bacalao y el perejil picadito. Ir añadiendo poco a poco y sin dejar de remover la leche templada y el aceite.
Rellenar con la brandada los pimientos del piquillo previamente escurridos.
Cortar para cada pimiento tres láminas de pasta filo con la punta de un cuchillo afilado un tamaño en el que se pueda envolver el pimiento con desahogo.
Poner el pimiento sobre las láminas, envolver formando un paquetito y colocar en una bandeja de horno.
Continuar igual con todos los pimientos.
Pintar con huevo batido.
Meter al horno precalentado a 180º durante 10 o 15 minutos hasta que se doren.