Empezamos lavando el calabacín y sacando los gajos, yo suelo dividirlo en 3 o 4 partes (dependiendo del tamaño) y después corto cada una de las partes en 6 u 8 gajos. Añadimos sal y vamos calentando el horno, a 190º
En un recipiente batimos el huevo, y en otro mezclamos el pan rallado, el parmesano, el ajo en polvo, el pimentón y la albahaca. Pasamos los gajos primero por el huevo y después por nuestro pan rallado especiado.
Colocamos los gajos en una bandeja con papel de horno, y metemos al horno durante 30 minutos. Procura no meter ningún otro producto en el horno durante el horneado, ya que la humedad que generan otros productos impide que queden crujientes.