Comenzamos lavando los espárragos, cortamos las puntas a la misma medida (unos 8 centímetros), las envolvemos en papel de aluminio y las guardamos en la nevera para otra preparación. Quitamos la parte dura de los tallos esparrago, se quiebra sola al flexionar el espárrago, lo cortamos en trozos pequeños. Picamos toscamente la cebolla y el calabacín. Esta receta la vamos a elaborar al modo tradicional y con la Thermomix. AL MODO TRADICIONAL: Ponemos a pochar la cebolla en una sartén honda con un poco de sal a fuego lento, la dejamos cocinar hasta que este trasparente, en ese momento le incorporamos los espárragos trigueros, dejamos que se cocinen unos minutos, le añadimos el calabacín removemos para mezclar todo, lo tapamos y que se guise poco a poco. Cuando veamos que las verduras han soltado todos sus jugos cubrimos con caldo de pollo, le añadimos pimienta, nuez moscada y el queso de rulo y lo dejamos cocinar unos quince minutos. Pasado este tiempo, trituramos con la batidora y colamos para quitar extraterrestres del plato. CON LA TERMOMIX: Ponemos en el vaso de la Thermomix la cebolla, yo la pongo 10 minutos a velocidad 1 y 90º, pasado este tiempo le incorporamos los espárragos y repetimos la jugada, 5 minutos, velocidad 1 y 90º. Cumplido este paso le agregamos el calabacin y otros 5 minutos. Cubrimos las verduras pochadas con caldo de pollo, le añadimos el queso, la nuez moscada, la pimienta y la sal. Cocinamos 15 minutos, velocidad 1, 100º. Cuando este lista trituramos súper fino y colamos. Cocemos cuatro puntas de esparrago por comensal: agua hirviendo con sal, cinco minutos y los refrescamos con agua fría. Guardar el caldo de la cocción por si queremos aligerar la crema. PRESENTACIÓN: Es imprescindible colar la crema para quitar todas las posibles fibras del esparrago que han podido quedar después del triturado. La colocamos en copas o vasos bonitos y lo adornamos con las puntas de esparrago triguero.