Fue ver la foto de esta sopa y querer hacerla. Me encantan las sopas, los tonos dorados en la comida, el huevo hilado... todo se aunó para que yo hiciera esta sopa. El caldo de pollo oriental no se hace como el caldo occidental, es decir, con puerro, apio, zanahorias... tiene un aroma diferente.
En la olla rápida se ponen las carcasas de pollo, jengibre y partes verdes de un manojo de ajetes. Se añade 1,5 litros de agua. Se tapa la olla y se pone a fuego fuerte.
Cuando la segunda anilla naranja suba, se baja el fuego y se deja 15 minutos. A mi me gusta hacer el caldo el día anterior para poder enfriarlo y desengrasar más fácilmente. Salió 1,200 litros de caldo.
Sopa:
Cortar la pechuga en tiras y cortarla muy finamente:
Echar al pollo un chorrito de salsa de soja y sal. Mezclar bien.
Poner la mitad del maíz en el vaso batidor y 1 ó 2 cazos de caldo de pollo. Triturar hasta formar una crema.
Añadir esta crema y la otra mitad del maíz a la olla donde tenemos el resto de caldo. Llevar a ebullición.
Cuando arranque a hervir, agregar el pollo, bajar el fuego y dar vueltas para que los trozos de pollo se suelten en el caldo. Vuelve a llevar a ebullición el caldo.
Para espesar la sopa, poner en un bol la fécula de maíz y el agua. Mezclar bien.
Retira la olla del fuego y añadir la mezcla de fécula y agua. Mezclar bien y volver a llevar a ebullición para que la fécula se cocine.
Batir 3 huevos con sal en un bol y volcar en la olla lentamente mientras damos vuelta con una cuchara a la vez para que se formen hilos de huevo. Salpimentar la sopa.
Cortar los ajetes finamente y añadirlos a la sopa. La cantidad al gusto:
Sirve la sopa en cuencos junto con unas gotas de aceite de sésamo.
Quien no ha visto alguna película en la que al protagonista, enfermo con gripe, le llevan una sopa china de pollo y maíz comprada en un "takeaway". Esos momentos en los que te sientes pocha y una sopa de este estilo te revive. Yo soy muy de engancharme con comidas que veo en series y películas. Todavía recuerdo las fuentes de jabalí asado de la película "Asterix" que ví de niña y que nunca pude llevarlas a la realidad (obvio), arrancar un muslo y comérmelo como una gañana.