Comenzamos picando bien menudito la cebolla, el diente de ajo y el perejil, y cortando las patatas en trozos o en dados no muy pequeños.
En una cazuela con un poco de aceite de oliva rehogamos la cebolla y el ajo. Añadimos después las patatas y el perejil. Le damos a todo ello unas vueltas con una cuchara de madera y ponemos 1/2 cucharadita de pimentón dulce.
A continuación cubrimos con el caldo de verdura ó bien con agua si no disponemos de caldo, 2 hojas de laurel, 1/2 vaso de vino blanco y una pizca de sal. Dejamos cocer hasta que las patatas estén a mitad de cocción. Añadimos entonces las judías verdes y finalizaremos el guiso cuando las patatas estén ya cocidas (comprobamos de sal antes de servir).
Un plato muy rico para los días de frío que nos trae el invierno, con su caldito caliente... ¡buenísimo!
Comentarios de los miembros:
Facil y riquisima