Empezamos disolviendo la levadura en la leche tibia. A continuación añadimos la mitad de la harina, la sal y seguimos echando la harina, pero con cuidado, porque a lo mejor no necesitará toda. Lo mejor es ir amasando y iréis viendo si hace falta más o menos harina.
Cuando tengamos hecha la masa, formamos una bola, le hacemos unos cortes para que respire, la tapamos con un paño y la dejamos en un sitio cálido hasta que doble su volumen, que aproximadamente será una hora.
Cuando tengamos hecha la masa, formamos una bola, le hacemos unos cortes para que respire, la tapamos con un paño y la dejamos en un sitio cálido hasta que doble su volumen, que aproximadamente será una hora.
Dividimos en dos o en tres la masa (dependerá de si la queréis más o menos fina) y el resto la podemos congelar, estiradita, en una bolsa de congelado o en film. Con el rodillo vamos estirando hasta obtener el grosor deseado. Esta vez vamos a hacer una pizza diferente en la que la base no será de tomate. Ponemos las cucharadas de nata encima de la masa, una pizca de sal y lo distribuimos por toda la superficie. Añadimos el orégano, las setas escurridas, el bacon y el queso.
Y sólo nos queda llevarla al horno, precalentado a 180º, unos 12 minutos, o hasta que veáis que está doradita.
Comentarios de los miembros:
Riquísimo,seguro que se la haré.Gracias!!!!
Sabroso y delicioso
Yam, yam, yam,qué rico!!!!
Por finnnnnnnnnn diferenteeeeeeee
Deliciososa pizza un sabor inconfundiblee :)
Exelente pizza muy buena para variar las tradicionales gracias.
Que rica, gracias por compartir
APETITOSA RECETA, GRACIAS.
Me parece deliciosa y bien explicada, ya me dió hambre.