Esta receta es del blog de Food and Cook, maravillo blog con fotos super bonitas que ya con verlas te dan ganas de pegarle un lengüetazo a la pantalla del ordenador.
Mis recetas favoritas son aquellas que con ingredientes básicos y baratos hacen un plato digno de la mejor de las comidas. Y este es uno de ellos ya que lleva 3 ingredientes que cualquier familia con bajo presupuesto puede permitirse y el sabor es maravilloso.
Se puede servir como acompañante de un asado de pescado o carne, o a
Se ponen a cocer las patatas (yo las pongo enteras y sin pelar por lo que elijo patatas que no sean muy grandes) en un cazo hasta que estén tiernas, cuando estén listas las dejamos enfriar para poder pelarlas.
Cuando ya están frias y peladas las onemos las patatas en un bol y las machacamos con un tenedor.
Le añadimos 2 cucharadas soperas de queso Cheddar rallado y sal.
Mientras vamos cortando la cebolla y la col muy fina.
En una sartén, derretimos la mantequilla y rehogamos la cebolla a fuego lento durante 10 minutos (échale sal para ayudar a que sude y no se queme), pasado este tiempo agregamos la col y removemos hasta que tenga la textura que nos guste (si te gusta que la col cruja déjala 5 minutos)
En el bol que tenemos las patatas, añadimos la cebolla con la col rehogada y lo removemos muy bien hasta que estén todos los ingredientes bien mezclados.
Lo pasamos a una fuente de hornear y espolvoreamos la superficie con el queso restante. Lo metemos en el horno, previamente precalentado a 180º, durante 20 minutos.