¿Tus tomates comienzan a estar demasiado maduros? Ni se te ocurra tirarlos; en su lugar, vamos a transformarlos en una sabrosísima salsa de tomate frito. Una salsa perfecta para acompañar pastas, carnes o arroces e ideal junto a un par de huevos rotos. Apunta esta receta de aprovechamiento a la que siempre podrás recurrir cuando tus tomates comiencen a pocharse. Ve sacando la barra de pan porque puedes disfrutar hoy mismo de esta elaboración que te contamos paso a paso, justo aquí.
Lavar y pelar los tomates, retirar las semillas y córtalos en dados. Lavar y cortar el pimiento en brunoise (pequeños cubos). Pelar y picar la chalota y el diente de ajo desgerminado.
Pochar el pimiento, la cebolla y el ajo en una sartén con un poco de aceite de oliva. Cuando la cebolla tenga un color transparente, añadir los tomates. Agregar un poco de agua, tapar y dejar rehogar bien todo, a fuego lento, hasta que las verduras queden bien pochadas.
* Si lo deseas puedes triturar la mezcla por una batidora de mano para obtener una salsa más fina.
¿Cómo pelar los tomates fácilmente? Para quitar fácilmente la piel del tomate puedes escaldar los tomates. Con la punta del cuchillo haz una pequeña cruz en la base del tomate. No debe de ser demasiado profundo. Sumergir los tomates durante 30 segundos en una olla con agua hirviendo. Saca los tomates, pásalos a un bol con agua helada y ya puedes retirar fácilmente la piel de los tomates.
Comentarios de los miembros:
Muy buena receta me salio exelente