¿Y si aprendiéramos a hacer en casa esos famosos palitos crujientes y sabrosos para picotear? Disfrutar de estos mikados caseros, bañados en chocolate y coco, ¡es posible! :-) Una gran receta para compartir con jóvenes y adultos :-D
Sigue todos los pasos, explicados al detalle, para reproducir fácilmente tus palitos preferidos. Te lo mostramos todo aquí mismo ↓
Preparar la masa sablé: en un bol, batir el azúcar + la sal + la vainilla + la mantequilla pomada. Añade el huevo y mézclalo bien.
Añade la harina pero no lo hagas todo de golpe, mejor incorpora en varias tandas. Empieza mezclando con un batidor y termina con las manos.
Envuelve la masa en papel film transparente y aplánala (tardará menos en enfriarse que si lo guardamos en forma de bola). Refrigera en la nevera durante 15 minutos.
Estirar la masa sobre una mesa enharinada. Truco: Estirar un poco la masa, girarla 45°, y volver a estirar otro poco. Repetir esta acción hasta conseguir el tamaño deseado. Corta tiras de 0,5 cm de ancho.
Rueda, sobre la mesa de trabajo, cada una de las tiras para redondearlas y colócalas en una bandeja de horno forrada con papel sulfurizado. Cada palito debe de tener unos 10 cm de largo.
Cocina los mikados 10 minutos en un horno precalentado a 180°C. Sácalos del horno y deja enfriar. A continuación, baña cada uno de los palitos en chocolate fundido (puedes fundirlo en el microondas o al baño maría). Espolvorear con coco rallado y refrigerar durante 15 minuto para que se enfríe y solidifique.