Últimamente procuro hacer repostería endulzada de forma natural (aunque estos muffins llevan un poco de azúcar moreno), pero claro, no tienen el dulzor del azúcar procesado (ya sea blanco o moreno) o del edulcorante. De hecho no están nada dulces. A mi personalmente no me importa pero lo advierto para que no te lleves la sorpresa al primer bocado.
Se ponen los dátiles a remojar en la leche de almendra al menos 1 hora. Pasado este tiempo se trituran en el robot de cocina. Añadir el vinagre de manzana. Reservar.
En un bol se mezclan la harina, polvo de hornear, bicarbonato y especias dulces. Mezclar.
En el vaso batidor poner los plátanos, azúcar moreno, la leche reservada con los dátiles y el vinagre, aceite de girasol, sal y extracto de vainilla. Triturar.
Añadir esta mezcla al bol donde teníamos los ingredientes secos. Mezclar.
Añadir 25 gr. de nueces trituradas (no te pases triturando, es bueno que se noten los trocitos). Integrarlas en la masa. No la trabajes mucho para no desarrollar el gluten y evitar que estén duros.
Volcar esta mezcla en un molde para muffins y espolvorear con los restantes 25 gr. de nueces:
Meter al horno precalentado a 200º durante 20 minutos. A mitad de horneado girar la bandeja de horno para que los muffins que estaban al fondo estén más cerca de la puerta de horno. Si ves que se tuestan mucho cúbrelos con papel Albal
Suelo comprar plátanos muy muy maduros para que estén super dulces a la hora de incorporarlos a la receta. O los compro y los tengo en la cocina como 3 semanas hasta que se quedan casi negros.
Muchas gracias :)), no están muy dulces pero lo prefiero así.