¿Cómo limpiar el pescado? Guía completa para principiantes

Materiales que necesitas:

• Cuchillo afilado (específico para pescado, si es posible)
• Tabla de cortar
• Raspador de escamas (opcional)
• Papel de periódico o toalla de papel
• Agua
• Recipiente (para depositar las vísceras)

¿Cómo elegir el pescado?

• Frescura: Comprueba las agallas (deben ser rojas y brillantes) y los ojos (claros y prominentes). La carne debe ser firme y elástica al tacto.
• Tipo de pescado: La técnica de limpieza puede variar ligeramente según el tipo de pescado. Los pescados más pequeños, como las sardinas, pueden limpiarse enteros, mientras que los más grandes, como el salmón, suelen filetearse.

Este es el procedimiento:

Preparación:

• Lávate bien las manos con agua y jabón.
• Prepara la zona de trabajo con papel de cocina o toallas de papel para evitar ensuciar.
• Coloca el pescado sobre una tabla de cortar limpia.

Quitar las escamas:

• Sujeta el pescado firmemente con una mano y, con la otra, utiliza un raspador o el dorso de un cuchillo para raspar las escamas en dirección de la cola a la cabeza.

Si lo prefieres, puedes pasar el pescado por agua mientras raspas las escamas.

Abrir el pescado:

• Con el cuchillo afilado, haz un corte a lo largo del vientre del pescado hasta la cabeza, teniendo cuidado de no perforar los órganos internos.
• Retira con cuidado las vísceras, quitando también la línea lateral (una banda oscura que recorre el cuerpo del pez).

Limpieza interna:

• Lava el interior del pez con agua corriente, eliminando cualquier resto de sangre o vísceras.
• Si lo deseas, retira la cabeza y la cola del pescado.

Quitar las espinas:

• Para quitar las espinas, puedes utilizar pinzas o un cuchillo. Empieza por las espinas más grandes y retira después las más finas.


• Para los filetes de pescado, realiza un corte a lo largo de la espina dorsal, separando la carne de la espina.

Información adicional:

• Utiliza un cuchillo afilado: Un cuchillo afilado facilita el trabajo y evita que la carne se aplaste.
• Lávate bien las manos y los utensilios: la higiene es esencial para evitar la contaminación.
• Guardar el pescado limpio en un recipiente cerrado en el frigorífico: El pescado limpio debe consumirse lo antes posible.