Precalentamos el horno a 180º. Engrasamos el recipiente donde vayamos a realizar el bizcocho, le coloqué papel sulfurizado y lo volví a untar con mantequilla para asegurarme de que no se me pegue nada.
Separar las claras de las yemas. Montamos las claras a punto de nieve y reservamos en frio.
Montamos las yemas con el azúcar y la nata, vamos incorporando todos los ingredientes mientras vamos batiendo,
Añadimos la levadura y la harina y por útimo las claras montadas mezcando con movimientos envolventes.
Vertemos la mezcla en el molde y horneamos. Si lo haceis con la mitad de ingredientes con 30 minutos es suficiente si los doblais en 50 minutos listo