Envolvemos el membrillo en papel de aluminio, lo metemos al horno precalentado a 190º, lo dejamos por lo menos 2 horas.
Lo pinchamos con un palito de brocheta, cuando entre hasta el fondo sin problemas ya está listo para comer. PRESENTACIÓN:
Lo dejamos enfriar, lo pelamos y lo cortamos en trozos, machacamos o de la forma más adecuada para acompañar a nuestro plato. Lo podemos comer con sal acompañando segundos platos o con azúcar como postre.