Trocea el chocolate y derrite la mitad, ponlo en un molde rectangular que tengas, de 21x12 cm. Déjalo que se endurezca. Tiñe el fondant de los colores que desees, estíralo del tamaño del recipiente, con un pincel humedece el fondant por la parte que va a ir en contacto con el chocolate. Presiona un poco y adáptalo bien.Estira fondant de otro color y córtalo de igual tamaño que el anterior, pincela con agua la superficie y pégalo adaptándolo bien. Así sucesivamente, dependiendo de las capas que quieras, yo le puse cuatro. Derrite el chocolate restante y cumbre la última capa de fondant. Guarda en la nevera hasta que esté sólido.Desmóldalo, iguala los laterales y córtalo en cuadraditos o como más desees.