Poner en un bol la mantequilla, la nata y el azúcar mezclar bien y añadir la harina y la levadura. Amasar hasta que todo esté bien integrado, hacer un rulo, envolverlo en papel film y dejar reposar en el frigorífico un par de horas, para poder trabajar la masa con comodidad.
Dividir la masa en tres partes, enharinar la superficie de trabajo, y extender cada parte formando un círculo, yo he utilizado un plato llano para la medida. Con un cortapizzas dividir el círculo en ocho porciones triangulares. Colocar un pedazo de membrillo en la parte ancha, doblar las esquinas hacia adentro y enrollar.
Poner papel de hornear en la bandeja y cocerlos a 180º durante unos 15 minutos. Sacar, espolvorear con azúcar lustre y dejar enfriar sobre una rejilla.