Pasamos por agua los mejillones y ponemos en una cacerola sin agua, echamos el vino blando y la hoja de laurel.
Tapamos la olla y ponemos en fuego, los mejillones se van abrir con el vapor y el poco de vino que le hemos puesto.
Se abren rápido y todos, como vienen vivos no queda ni uno sin abrir. Ponemos en una sartén el aceite para hacer la salsa, añadimos la cebolla picada y dejamos que se dore un poco.
Echamos a la cebolla el harina y movemos, añadimos el vino y seguimos moviendo, le echamos la cucharada de tomate frito.
Le añadimos el pimentón picante y dejamos que se sofría un poco todo junto. Colamos el agua que han soltado los mejillones y se la añadimos, junto con el machado del diente de ajo y el perejil, echamos un poco de sal y dejamos cocer uno 8 minutos y probamos por si necesita mas sal.
Quitamos una concha a los mejillones juntamos con la salsa un minuto y servimos con una cerveza bien fría y la copa helada un manjar.
Y sin conchas en cucharilla una delicia, pero lo que si es una delicia son estos mejillones LINAMAR puedo deciros que son exquisitos y llegan a casa en unas condiciones excelentes. Es pero que os gusten, son sencillos de cocinar y ricos, besos Adita
Comentarios de los miembros:
Son deliciosos para una entrada