Amasamos todos los ingredientes a excepción del aceite y la levadura. El aceite lo iremos añadiendo conforme la mas vaya cogiendo cuerpo y de manera gradual. La levadura, como siempre, la incorporamos al final.
Tapamos la masa con un paño húmedo y dejamos reposar durante 90 minutos. Dividimos la masa en dos y la aplanamos con los dedos dándole forma redonda. Las colocamos sobre la bandeja de hornear, las tapamos con un paño húmedo y dejamos levar durante 2 horas.
Pasado el tiempo indicado le hacemos a las tortas unos hoyos con los dedos y pintamos con ayuda de un pincel con AOVE. Precalentamos el horno a 250º generando vapor. Horneamos a 210º durante 25 minutos.