Hoy seguimos con la elaboración de sales. Le ha tocado el turno a la guindilla, esta sal es genial por su picor. Este punto es voluntario, mas guindilla más picor, aquí la máxima de menos es más no se cumple, pero ojo, que pique pero sin pasarse no vayamos a añadirla a un plato y nos lo cargamos y no haya quien se lo coma.
Puedes elaborarla con tu chile preferido, a mi me encanta el chile de árbol, seco tiene un sabor delicioso y apetecible, yo los compro frescos y los dejo secar después los tr
ELABORACIÓN: La guindilla roja la podemos comprar ya seca o aprovechar esos restos que nos van quedando. La trituramos y la dejamos secar.
Cuando este bien seca la mezclamos con la sal, muy bien para que se integren. La mitad la pasamos por el molinillo para hacer sal fina de mesa, la otra mitad la conservamos con los trozos grandes.