Ponemos a marinar en una mezcla hecha con el vinagre, aceite y un majado de sal gorda, el ajo, las dos pimientas, coriandro y pimentón. Macerar en la nevera un par de horas. Formar la brochetas con dados de pechuga, aguacate y papaya procurando que sean del mismo tamaño.
Hacer la salsa con el pepino pelado y sin la parte interior que contiene pepitas cortado muy finito (dejamos unos bastoncitos para decorar) el yogur y , poner a punto de sal y enfriar.
Es increíble que esta salsa que no lleva nada, quede tan deliciosa en combinación con las brochetas. Vencir la tentación de aderezarla con algo más y menos mal, así está ideal.
Marcar las brochetas a la plancha, servir con su salsa. Apenas necesita cocción, es un vuelta y vuelta. Si se tienen ensartadas en la nevera y tenemos invitados, con la plancha caliente se hacen en apenas unos minutos.