Cortamos la raíz de los champiñones. Limpiamos los champiñones bien y los cortamos en láminas.
Untamos una fuente de horno con aceite y le añadimos el zumo del limón y sal.
Ponemos en la fuente todos los champiñones laminados y removemos bien para que se empapen de la mezcla de aceite y limón.
Añadimos las salchichas cortadas en rodajitas y las especias y removemos de nuevo.
Espolvoreamos toda la fuente con queso rallado y por encima otra capa de pan rallado. Lo metemos en el horno 10 minutos. a 200º, y por último 5 minutos más con la función de gratinado en el horno.