La preparación de estos muslos es en realidad bastante sencilla e iniciaremos calentando el aceite de oliva en una sartén lo suficientemente grande para que quepan los cuatro muslos.
Colocamos éstos últimos en la sartén, con la piel hacia abajo. Los dejamos dorar por unos 6 a 8 minutos, hasta que la piel quede crujiente. Volteamos entonces los muslos y los dejamos otros 8 minutos, ahora con la piel hacia arriba. La idea es que queden dorados de ambos lados.
Ahora prepararemos la salsa vertiendo la otra cucharada de aceite de oliva en una olla. Picamos finamente la cebolla y la sofreímos por un par de minutos. Le agregamos entonces el jugo de naranja, la salsa de soja y revolvemos. Añadimos el azúcar, la miel, la ralladura de naranja, sal y pimienta al gusto. Disolvemos en una cucharada de agua tibia la maicena y la vertemos a la preparación. Siempre con la olla en la lumbre revolvemos hasta que espese ligeramente.
Colocamos los muslos en un refractario y les vaciamos la salsa. Horneamos a 180ºC por unos 25 minutos. A lo largo de la cocción les recomiendo verter un par de veces salsa sobre los muslos con un cucharon y sin quemarse.