Comenzaremos precalentamos el horno a 200º C mientras preparamos el asado. Cortamos los ajos en daditos pequeños y los ponemos en un bol pequeño junto con el tomillo, ½ cucharadita de pimienta negra molida y 6 cucharadas de aceite de oliva virgen, lo mezclamos y lo reservamos.
Cogemos las paletillas le ponemos la sal y las untamos por ambos lados con el aliño que aviamos echo anteriormente. (si las dejamos en un recipiente tapado en el frigorífico 4 o 5 horas se potenciara más el sabor del asado).
Colocamos una cazuela de barro con un poco de agua en el fondo del horno (esto evitara que no se reseque demasiado el asado) y metemos las paletillas en la bandeja del horno, bajamos la temperatura a 180º C y las dejamos que se vallan haciendo.
Mientras se van haciendo las paletillas cortamos las verduras: los tomates en cuatro trozos, la cebolla pelada y también en cuatro trozos y las zanahorias peladas y cortadas en rodajas un poquito gruesas y las patatas peladas y también en cuatro trozos, le ponemos la sal y un chorrito de aceite y las mezclamos un poco.
Transcurridos 20 minutos, le damos la vuelta a las paletillas y ponemos las verduras repartidas en la bandeja del horno y rociamos con el vino blanco las paletillas y proseguimos el asado otros 20 minutos más y a continuación abrimos el horno y le damos la vuelta a las paletillas y las mojamos con el jugo que la carne va desprendiendo en su cocción.
Dejamos el cordero en el horno hasta que este hecho dándole la vuelta y mojando con el jugo cada 20 minutos. Si el cordero se quedara sin jugo, añadimos un vasito de agua para que siempre haya un poco de jugo en el asado.
Si vemos que el cordero esta hecho y las verduras no están todavía sacamos las paletillas del horno y dejamos las verduras un poco más.
Transcurrido el tiempo necesario, servimos el cordero acompañado de las verduras, la salsa del asado y con unos piñones por lo alto de las paletillas.