Primero pelamos las patatas y después lo cortamos en rodajas de 1/2 centímetro de grueso.
Preparamos una cacerola con 1,5 litro de agua con 2 cucharaditas de sal, 1 avecrem y un diente de ajo pelado y entero.
Introducimos las patatas en la cacerola y las cocemos unos 10 - 12 minutos.
Después tiramos el agua y pasamos las patatas por agua fría.
Preparamos la salsa blanca en un bote con 300 ml de leche entera, 100 ml de nata para cocinar, 5 cucharadas de harina de repostería, 1 cucharadita de azúcar, 1 cucharadita de sal y un poco de pimienta negra.
Ponemos la tapa al bote y mezclamos bien agitando.
Colocamos las patatas en una fuente y añadimos la salsa blanca.
Horneamos a 180º en 30 minutos.
Sacamos la fuente y añadimos el queso y un poco de orégano encima y ahora horneamos otro 15 minutos a 180º.