Con un pincel enmantecamos el vaso o recipiente que vayamos a utilizar. Espolvoreamos con cacao amargo y retiramos el exceso. Reservamos. Derretimos los 30 g de chocolate con la mantequilla en el microondas.
Batimos el huevo con el azúcar y se lo añadimos a la mezcla anterior. Incorporamos la harina tamizada y volcamos la mezcla en el molde (vasito de plástico resistente, cristal, loza o silicona) al que previamente habremos pincelado con mantequilla y espolvoreado con cacao amargo.
Introducimos un trocito de chocolate fondant y lo hundimos bien dentro de la masa. Llevamos al micro y programamos 2 minutos a 350W. Tenemos que observar que sube. A primera vista parece que no está hecho, pero si está brillante y un poco pegajoso al tacto, habremos conseguido el punto ideal.