Mi primera vez haciendo una mousse y el resultado no podía haber sido mejor. Me ha encantado. Me han salido 8 raciones pero es un postre que congela bien. Apta para diabéticos.
Lavar, rallar y exprimir 2 limones. Yo conseguí como 112 gr. de zumo. Reservar.
Disolver la gelatina en 2 dedos de agua hirviendo y mezclar hasta que se disuelva la gelatina. Mezclar con el zumo de limón.
Separar las claras de las yemas de los huevos.
En un bol se mezcla el queso crema light, el edulcorante, las yemas de huevo y la ralladura de los limones. Con las varillas de la batidora mezcla bien hasta que quede una crema suave.
Se montan a punto de nieve las claras. Ya sabes, cuando al volcar el cuenco las claras montadas no se caigan, es porque ya están en su punto.
Incorporar suavemente las claras montadas a la mezcla de gelatina con zumo de limón y agua caliente.
A continuación añadir suavemente la mezcla de queso crema, huevos, edulcorante y ralladura. Mezclar con cuidado para que no se bajen las claras.
Verter sobre vasitos o moldes individuales y llevar a la nevera durante 6 horas.
Pasado este tiempo ya podrás hincarles el diente. En el momento de servir puedes decorar cada vasito con hojitas de menta y frutas del bosque, por ejemplo unas grosellas. Yo no tenía, por lo que sólo espolvoreé con más ralladura de limón y menta.
La verdad es que no dura en la nevera más de 1 día