En primer lugar cortamos la berenjena en rodajas muy finas y las dejamos a remojo en agua con abundante sal para que expulsen el líquido amargo que tienen en su interior. Con una hora será suficiente. Escurrimos el agua donde estaban a remojo y las secamos con un paño de cocina.
Los trozos de las esquinas que harían unas rodajas muy pequeñas podemos aprovecharlas para hacer Croquetas.
Espolvoreamos las rodajas de berenjena con ajo en polvo, y escogiendo de dos en dos, hacemos pequeños emparedados con dos rodajas de berenjena y una loncha de queso emmental en el medio.
Pasamos por harina de trigo, huevo batido y pan rallado, y freímos en abundante aceite hasta que las ruedas estén doradas por ambos lados.
Dejamos escurrir sobre papel de cocina y servimos calientes.
Podemos aprovechar la explicación de esta receta para hacerla, por ejemplo, con láminas de patatas, o con calabacín. Sólo tendremos que saltarnos los dos primeros pasos, el resto lo hacemos igual.
Muy muy buena. Una cosita....si la berenjenas la habéis recogida vosotros y son frescas no necesitan ser puestas en agua y sal. El amargo se produce cuando no son super frescas
Gracias nos alegra mucho que te haya gustado esta receta. Si tienes alguna duda o necesitas alguna receta en concreto para hacer más llevaderos estos días, no dudes en escribirnos. Un saludo del equipo!
Gracias nos alegra mucho que te haya gustado esta receta. Si tienes alguna duda o necesitas alguna receta en concreto para hacer más llevaderos estos días, no dudes en escribirnos. Un saludo del equipo!