Precaliente el horno a 180 grados y engrasar la sartén con mantequilla. Batir 170g de mantequilla derretida con 140 gramos de azúcar blanco hasta que quede cremoso. Añadir tres huevos, uno a uno sin dejar de batir.
Tamizar la harina con levadura 140g (se puede encontrar en cualquier supermercado). Mientras se agita constantemente, añadir la ralladura de limón y jugo rallado. Verter la mezcla en el molde.
Poner en el horno durante una hora aproximadamente. Ya sabes, un palillo, éste salga limpio y si está listo para comer. Deje enfriar antes de desmoldar.