Lavar las mandarinas y colocarlas en una cacerola cubriéndolas con agua. Agregar 1 pizca de sal y hervir durante 3 minutos. Escurrirlas, pelarlas y cortarlas en 3 rodajas cada una.
Quitarles las semillas, pesarlas y añadir el mismo peso en azúcar. Elegir las 2 mejores cáscaras que sacamos y cortarlas en tiras finitas y colocarlas en una cacerola con el azúcar, la fruta, el jugo de limón y una tacita de agua.
Mezclar y cocinar sobre fuego fuerte hasta que rompa el hervor. Luego, bajar el fuego y revolver de vez en cuando, hasta que tome punto mermelada y se torne de color rubio dorado.
Si se controla el punto con termómetro, éste debe marcar de 108º a 110º, otra forma de saber el punto es colocándolo en un platito, y al enfriarse no se desliza.
Comentarios de los miembros:
Son exelente