Ponemos en un recipiente las 2 cucharadas de miel y la de mostaza, a las chuletas de cerdo les quitamos el hueso y las cortamos en tiritas o directamente se le puede pedir al carnicero unos filetes de cerdo con poca grasa cortados no muy finos y estos en tiritas nos sirven perfectamente bien. Dejamos macerar en la nevera por algunas horas.
Lavar bien las patatas, no quitarles la piel, cortarlas en cuartos a lo largo, y luego volver a cortar los cuartos en mitades quedaran como dientes de ajo. Y colocarlas en un recipiente, añadir hierbas, en este caso perejil y orégano pero la verdad es que se le pueden agregar las que ustedes quieran, mezclar bien para que se impregnen con hierbas. Luego ponerlas en una sartén con aceite y freírlas hasta que se doren.
Mientras se hacen las patatas, ponemos en una sartén, apenas aceitada, el cerdo ya macerado y dejamos que se cocine a un fuego medio, sin que se queme la miel, cuando notemos que se comienza a dorar y formar un caramelo retiramos del fuego.
Emplatamos el cerdo con las patatas y salpimentamos una vez que esté en el plato, le queda muy bien a esta preparación una sal gruesa o marina, que otorga un toque crocante y un contraste interesante con el dulzor de la miel.
Seguro que con el solomillo queda también riquísima! Gracias por tu comentario, nos alegra saber que te ha gustado :)