Preparamos el aderezo: ponemos 100 ccs de agua caliente, 100 ccs de miel, 25 ccs de zumo de un limón y romero. Mezclamos bien. Reservamos. Precalentamos el horno a 160º.
En una bandeja de horno, ponemos un chorrito de aceite, colocamos las láminas de patata repartidas por la bandeja. A continuación, repartimos la manzana por encima de la patata y hacemos lo mismo con la cebolla. Salpimentamos las costillas y añadimos un poquito de ajo en polvo por ambos lados.
Las colocamos en la bandeja. Con ayuda de un pincel, las untamos con miel y cubrimos con un poco de la salsa de miel, limón y romero. Introducimos la bandeja en el horno, a media altura y horneamos una hora, regando con los jugos del fondo de la bandeja cada cuarto de hora y dándole la vuelta a mitad del horneado. Cuando le demos la vuelta, pintaremos ese lado con miel y añadiremos más salsa si fuese necesario.
Obtendremos mejores resultados si empezamos dorando la pieza por ambos lados a temperatura más elevada y acabándola a 180º la última media hora. En caso de que la carne esté poco hecha para tu gusto, hornéala durante otros 10 minutos a temperatura suave y cubierta con papel de aluminio para que no se queme la salsa. Sirve la carne, acompañada de las patatas con manzana y cebolla que pusimos en la base.
Comentarios de los miembros:
Tiene una pinta riquísima!!!!....intentare hacerla hoy