La noche anterior dejamos, en la nevera y tapados, los filetes de pechuga en un recipiente con un ajo pelado y entero y la rama de perejil limpia y entera.
Cuando los vayamos a preparar retiramos el ajo y el perejil y salpimentamos los filetes.
En una sartén ponemos aceite a calentar. Mientras, batimos un huevo en un plato y en otro plato echamos semillas de sésamo.
Cuando el aceite esté caliente, pasamos los filetes por el huevo y luego por las semillas. Las haremos con aceite caliente pero no hirviendo pues se quemarían las semillas y no se haría la carne.
Como acompañamiento vamos a poner unas patatas fritas. Con ellas freímos un pimiento verde (los que conocemos como italianos), por persona.
Para servir: cortamos los pimientos en tubos y ponemos en los tubos unas patatas fritas. Es un acompañamiento sencillo que queda gracioso en el plato.