Para preparar el adobo, se ponen todos los ingredientes en el robot de cocina y se pica hasta formar una pasta. Se salpimenta al gusto.
Se ponen los trozos de pollo en una fuente de cerámica y se vierte el adobo y se frota bien el pollo con él. Se cubre con film de cocina y se deja en la nevera un mínimo de 2 ½ horas o toda la noche.
Se enciende el horno a 210º y se deja hasta que el pollo esté hecho. A mitad de cocción se le dá la vuelta y se vuelve a untar con el adobo.
Cuando el pollo está hecho se sirve en una fuente con arroz basmati y pappadums.