Esta es una receta con un resultado algo dulce. Nadie diría que el ingrediente principal es la Coca Cola.
Yo uso la lata que tenga en la nevera, ya sea versión zero, light o marca blanca. El sabor cambia ligeramente pero tampoco tengo un paladar tan entrenado como para que me importe mucho.
Congela perfectamente y es ideal para llevar al trabajo con un arroz blanco como acompañamiento.
En una olla se pone parte del aceite, yo pongo 15 ml. Cuando esté caliente se fríe el pollo. Una vez dorado se saca y se reserva:
Se añade el resto del aceite a la olla. Cuando esté caliente se añade toda la verdura troceada y se deja pochar 30 minutos, dando vueltas de vez en cuando:
Pasados los 30 minutos añadir el tomate frito y dejar cocinar 5 minutos más.
Triturar la salsa. Yo la paso al vaso batidor y una vez triturada la vuelvo a volcar en la olla junto con la Coca Cola y el pollo:
Se pone la tapa y se lleva a ebullición. Dejar cocinar a fuego bajo 25 minutos.
Y ya está. Como todos los guisos, gana en sabor al día siguiente.