Pedazo de título que le he puesto a esta receta. Hacía como 12.523 días que no comía cerdo por el tema de mi colesterol. Pero quería hacer esta receta, claro que podría haberla hecho con pollo pero el solomillo de cerdo es una carne bastante magra asi que por una vez y sin que sirva de precedente, he hecho una receta con cerdo.
En cuanto al resto de ingredientes son totalmente permitidos por mi dueño y señor el colesterol, que es el que manda en mi cocina.
Se pica la cebolla y se frien en el mismo aceite donde hemos dorado el solomillo (si fuera necesario se echa más aceite)
Se añade el queso rayado y removemos bien hasta que se deshaga. Como es queso vegano hasta que no se mezcla con la nata no hay forma de que se deshaga un poco.
Puedes sustituir este queso vegano por una cuñita de queso azul o cabrales. De hecho la recieta original era con cabrales.
Se echa entonces la harina y se remueve otra vez para tostarla. Se añade el chorrito de brandy y se va ligando.
Se desmenuza la media pastilla de caldo de carne y se espolvorea por encima. Se añade la nata vegetal, se mezcla como si fuera una bechamel para que el queso y la harina se mezcle bien con la nata y vaya formando la salsita. La primera vez que la hice fué con queso cabrales según la receta original, y obviamente era más fácil porque el queso se funde mejor.
Volvemos a poner las rodajas de solomillo dentro de la olla y dejamos como 5 minutos. Para que la carne coja bien el saborcito del queso azul.