Hoy os traigo unos deliciosos hojaldres que bien fresquitos con estos calores vienen de perlas. Ésta receta puede ser más sencillita si el hojaldre es comprado o un poco más compleja, si se trata del hojaldre casero. En este caso es casero, me queda pendiente colgar la receta. En lugar de nata, los relleno de frosting de queso que le da un sabor espectacular, mejor que el sabor que le aporta la nata.
Para hacer la nata, la montamos hasta que coja un poco de consistencia con la batidora de varillas, añadimos el azúcar glass, el queso y terminamos de montar hasta que haga picos.
El hojaldre se ha de manipular lo menos posible, ya que si lo toqueteamos mucho no subirá. Lo cortamos en cuadrados del tamaño que queramos, tal cual, lo sacamos del envase (sin pasar rodillo) y los colocamos en la bandeja del horno (precalentado) sobre papel vegetal a una temperatura de 200 ºC durante 15 minutos. Deben de haber subido despúes de ese tiempo y estar doraditos.
Dejamos enfriar, abrimos por la mitad con un cuchillo y rellenamos con la nata.
En un bol añadir un chorro de miel, una pizca de agua y meter en el microondas unos segundos (queda como almíbar). Con ayuda de una brocha y sin empaparlos pintamos los miguelitos y espolvoreamos con azúcar glass.