El resultado de esta receta ha superado con creces mis expectativas. Ha quedado espectaculármente buena. Y el chocolate, su contrapunto perfecto.
Para estas mini tartitas de queso he usado un molde de muffins, de 12 cavidades, y utilicé moldes para magdalenas. Si quereis hacerlo en un formato tarta, de 24 cm más o menos, teneis que aumentar las cantidades de todos los ingredientes en un tercio. Pero este formato, en mini porciones, resulta perfecto para una merienda y tomarlo con un café.
Para la base de galletas: Derretimos la mantequilla de cacahuete en el microondas, unos 30 segundos y machacamos las galletas hasta convertirlas en polvo. Lo juntamos con la mantequilla de cacahuete y ponemos 2 cucharaditas de la mezcla en el fondo de los moldes de papel para magdalenas, apretando bieén contra el fondo con el dorso de una cucharilla.
Para la crema de queso: Derretimos la mantequilla de cacauete en el micoondas durante 30 segundos. Ponemos todos los ingredientes en una batidora, o robot de cocina, y lo mezclamos hasta tener una crema homogénea.
Repartimos la crema entre todos nuestros moldes. Horneamos a 160º, calor arriba y abajo, durante 25 minutos. Apagamos el horno y dejamos dentro que se vaya enfriando despacio.
Para el topping: Metemos todos los ingredientes en el microondas durante 50 segundos y revolvemos bién la mezcla hasta que esté todo bién integrado. Lo distribuimos entre todas nuestras tartitas.
Machacamos una galleta tipo digestive y algunos cacahuetes y decoramos.