Retirar las hojas de la piña y reservar alguna para decorar. Pelar la piña, cortarla en 4 de arriba a abajo y retirar la parte leñosa del centro.
Pesar 350 g, cortarla a cuadritos pequeños, ponerlos en un cazo, añadir la leche de coco y el azúcar y cocer poco a poco hasta que se redujese a la mitad. Retirar del fuego, añadir la gelatina hidratada y triturar hasta obtener un puré muy fino y colar.
Pasar el puré a un bol rodeado de hielo, añadir el ron y dejar enfriar removiendo frecuentemente hasta que la crema empieza a cuajar. En este punto, añadir la nata montada y mezclar delicadamente. Colocarla en copas y enfriar unas horas en la nevera.
Estender el azúcar en una bandeja con papel sulfurizado procurando que quede una capa fina y hornear a 220º hasta que el azúcar caramelize; retirar, empolvar con coco rallado, una vez frío partirlo y guardarlo en un recipiente hermético.
Decorar la copa con las hojas de la piña y los xips de coco.