Una tarta de aspecto sencillo, fácil elaboración y un sabor espectacular.
Aunque su elaboración es sencilla, sí requiere su tiempo, pero el resultado merece la pena.
DE LA TRUFA COCIDA: Comenzamos a hacer la trufa el día anterior, calentando en un cazo la nata y el azúcar hasta que empiece a hervir. Apartamos del fuego y añadimos el chocolate hasta que éste se deshaga. Volvemos a poner la mezcla al fuego hasta que comience a hervir de nuevo, momento en que retiramos nuevamente y una vez enfriada la mezcla, guardamos en el frigorífico tapada con film hasta el día siguiente en que la montaremos.
DE LAS PLANCHAS DE BIZCOCHO: Debemos dividir los ingredientes entre dos para hacer cada una de las planchas. En un bol, montamos 4 claras a punto de nieve. En otro bol, colocamos 3 yemas, 50 grs. de azúcar, la cucharadita de miel y 1 huevo entero, y batimos hasta triplicar su volumen. (Si realizamos ésta operación al baño maria, las yemas montarán mucho mejor y más rápido.) Vertemos la masa sobre un papel de hornear engrasado y enharinado y sobre una placa de horno e introducimos al mismo precalentado a 180º durante unos 10 minutos. Realizamos la misma operación para la segunda placa de bizcocho.
DEL ALMÍBAR: En un cazo, llevamos a ebullición el agua junto con el azúcar y el ron y dejamos hervir durante 5 minutos hasta que reduzca y coja consistencia de almíbar. Reservamos.
DEL GANACHÉ: Llevamos la nata a ebullición y una vez comience a hervir apartamos y añadimos el chocolate y removemos hasta que se integre con la nata.
MONTAJE DE LA TARTA: Montamos la trufa con unas varillas, como si estuvieramos montando nata, pero no en exceso para que no se convierta en mantequilla. Cortamos los bordes del bizcocho para cuadrarlos. Me salieron dos planchas de unos 27 centímetros de largo por 22 de ancho. Emborrachamos cada plancha con la mitad del almíbar y cubrimos con parte de la trufa cada una de las planchas. Dividimos cada plancha en dos, por lo que resultaron cuatro tiras de bizcocho de 27 cms por 11 cms. de ancho. Comenzamos enrrollando una de las tiras y una vez enrrollada, sobre ésta vamos enrrollando el resto hasta acabar con las tiras de bizcocho. Ponemos la tarta en pie y cubrimos la parte superior y los bordes con el resto de la trufa. Cubrimos la tarta con el ganaché de chocolate y adornamos al gusto: Yo cubrí la superficie con chocolate rallado e hice unos adornos con chocolate, fundiendo 50 grs. de chocolate fondant al baño maría que dispuse en una bolsa para congelar que me sirvió de manga pastelera, cortando una punta de la bolsa de tamaño muy pequeño a modo de boquilla y haciendo filigranas con el chocolate sobre papel vegetal. Una vez frio el chocolate, adorné la tarta con ellas a modo de peineta como podéis ver en la foto superior.
Buena idea y diferente de hacer una torta, otra rica variante del relleno podría ser con dulce de leche mezclado con algo de queso crema y un toque de whisky
Comentarios de los miembros (23):
Qué buena pinta!!!!!
Deliciosamente rico
No me gusta
Me parece sencilla y yo que soy repostera le encuentro deliciosa y como novedosa
Demaciado rico!!!!!
Se ve muy apetitosa vale la pena probar
MAS TRABAJITO..PERO VALE LA PENA HACERLA..SE VE MUY RICA
Muy buena
Super Rica
Buena idea y diferente de hacer una torta, otra rica variante del relleno podría ser con dulce de leche mezclado con algo de queso crema y un toque de whisky