A finales de la primavera y antes de que aparezcan sus flores, recogeremos las hojas jovenes, las cortaremos en trozos y limpiaremos.
Ponerlas a hervir en una cazuela con agua y en el momento en que levante el hervor, apagar el fuego y dejar que se enfrié totalmente.
Meterlas en garrafa de boca ancha o vasija de barro y cubrirlas con una salmuera echa con agua, vinagre y sal.
La proporción variara según gustos. Orientativamente 5 partes de agua, 1 de vinagre y ½ de sal. A los 3 dias ya se puede comer. Si no lo queremos tan fuerte de vinagre, podemos aumentar a 6 ó 7 las partes de agua.
Poner algunas veces en la ensalada su sabor inenso es peculiar , parecido a las alcaparras , pero más intenso combina con cualquier cosa.