Se pica la carne de cerdo, no hace falta que sea muy menudo, hacer a cuchillo. Se le quita la piel a la morcilla, se pone con la carne en un cuenco y se deshace la morcilla con un tenedor. Se mezcla todo bien. Se añaden los piñones y se sala al gusto.
Se prepara el rebozado, mezclando los sólidos con el aceite, mejor con batidora eléctrica o robot. A continuación, se va echando el agua poco a poco mientras se sigue batiendo, controlando la consistencia, que debe ser la de una bechamel de cobertura, más o menos. Se deja reposar 20 minutos, para que se hidrate todo y empiece a actuar la levadura.
Sirviéndose de dos cucharitas de postre, se hacen albóndigas del tamaño de una nuez pequeña, que se van reservando. Se calienta aceite abundante en una sartén o se enciende una freidora, aproximadamente a 180 ºC.
Se pone el rebozo en un cuenco bajo, para mayor comodidad, y se van echando las albondiguillas. Se les da la vuelta para que se rebocen bien, con una cucharita, y con ella misma se van echando en el aceite caliente. Se sacan a un papel absorbente y se comen calentitos.
Las recetas, magníficas, tanto la de morcilla como la del solomillo. Pero, señores, tanto en España como en Francia habemos muchos católicos que guardamos abstinencia los viernes de cuaresma y las DOS recetas la infringen. Bueno, a ver, no hay recetas veganas y de pescado deliciosas para nosotros, caramba. Las de hoy son maravillosas... Para cualquier otro día de la semana... dicho sea con los mayores respetos hacia los que no practican...
Nos alegran que te hayan gustado las recetas aunque no sean apropiadas, como bien dices para los practicantes. Lo tendremos en cuenta para los próximas ocasiones y de momento, te mandamos una receta que sí es adecuada y deseamos que le gsute --> https://www.petitchef.es/recetas/entrante/bunuelos-de-bacalao-portugueses-fid-1566873