Hace relativamente poco que he empezado a aficionarme al cuscús. No se por qué, nunca le he tenido afición. Pero ahora me parece fantástico. Es cómodísimo de preparar (el cuscús precocinado, claro). Se que en los países árabes se cocina con una cuscusera y todo un proceso de cocción y quizás eso es lo que me echaba para atrás.
Para preparar las verduras: Se prepara la verdura: la cebolla se corta en brunoise, la zanahoria en rodajas finas y a su vez cortadas por la mitad, los pimientos en trozos, el tomate en brunoise y el ajo finamente picado o triturado con el prensa ajos.
Se pone un chorreón de aceite en una olla y se pone a pochar toda la verdura menos el tomate. Se añade 1 cucharadita de sal.
Pasados 10 minutos se añaden las 2 cucharaditas de Ras el Hanout, mezclar bien.
Añadir el tomate. Se deja cocer 15 minutos.
Para preparar el cuscús: Se pone la sémola en un cuenco con la medida necesaria para que luego crezca.
Se hierve agua en un cazo y se añade la misma medida de agua que de cuscús. Se tapa el cuenco y se deja 5 minutos. Pasado este tiempo la sémola habrá absorbido toda el agua. Añadir un chorrito de aceite y con un tenedor mezclar.
Pero bueno, de ahora en adelante el cuscús está aquí para quedarse, como acompañamiento, como comida en sí, en ensalada...
La receta original era para 2 personas pero yo he doblado los ingredientes y he preparado verduras para 4 raciones que son fácilmente congelables. Sólo tienes que descongelar una ración y preparar el cuscús en 5 minutos (al menos el mío).
Yo lo compro en Alcampo