Mezclar los huevos con el azúcar y la mantequilla ablandada. Incorporar la harina tamizada, junto con la sal, la vainilla del interior de la ramita y la cúrcuma.
Verter la leche y la levadura encima y amasar durante 5 minutos con amasadora y unos 15 si lo hacemos a mano.
Dejar reposar la masa tapada unos 45 minutos para que leve al doble de su tamaño inicial.
Ponernos unas gotitas de aceite en las manos y amasarla un poco para quitarle el aire.
Hacer un bollo grande y redondo y cortarlo en 8 trozos
Hacer con cada trozo unos "churros" o rulos y disponerlos enrollados sobre sí mismos, a modo de caracolas, sobre la bandeja del horno cubierta con el papel sulfurizado.
Pintarlas con el huevo batido, añadirle un poquito de azúcar húmeda por encima y colocarle un arándano deshidratado en el hueco de la espiral.
Hornear durante unos 8 minutos a 225º con la bandeja colocada de la mitad para abajo del horno y, si tenemos ventilador, mejor.
Cuando haya transcurrido el tiempo, apagar el horno y dejar la bandeja un par de minutos con la puerta del horno entreabierta.