Limpiamos bien las alcachofas y las ponemos a cocer con los ingredientes que hemos puesto en la receta hasta que estén tiernas. Por otro lado hacemos la bechamel, sofriendo la mantequilla junto a la harina y añadiendo poco a poco la leche y un par de cucharones del caldo de cocer las alcachofas. Dejamos al fuego hasta que tenga la consistencia que nos guste. Salpimentamos y aromatizamos con la nuez moscada y el perejil picado.
Para montar el plato, sacamos las alcachofas del caldo y las colocamos en una bandeja apta para el horno, y las vamos rellenando con los tacos de queso y el jamón serrano y por último el huevo cocido picado. Con el jamón que me ha sobrado de rellenar las alcachofas, y como dice nuestro arguiñano, en la cocina no se tira nada, se lo he agregado a la bechamel.
Cubrimos las alcachofas con la bechamel y rallamos el queso gruyere encima de cada alcachofa Y llevamos a gratinar al horno hasta que esté doradito.
Y listo para servir, para comer y para chupetearnos todos los dedos. ¡¡Que aproveche!!