Cogemos los calabacines, le cortamos los extremos y los cortamos por la mitad longitudinalmente. Ahora hacemos unos cortes sin llegar a cortar la piel del calabacín. Así conseguiremos vaciar los calabacines mucho más fácilmente.
Ahora los vamos a escaldar, pero como mis calabacines son un poco grandes no me entran en la cazuela, así que los voy a partir por la mitad. Vamos metiendo los calabacines en la cazuela y los dejamos hirviendo 3, 4, 5 minutos como mucho. Después los sacamos de la cazuela y dejamos que se atemperen.
Mientras tanto, nos ponemos con el relleno, cogemos un pimiento verde, le quitamos la parte blanca y las semillas y vamos a cortarlo en trocitos pequeños. Lo reservamos. Repetimos la misma operación con un pimiento rojo. Ahora cogemos una cebolla o cebolleta pequeña y también la troceamos en pedazos pequeños. Y reservamos junto con los pimientos. A continuación, pelamos y troceamos una zanahoria.
Ahora añadimos un chorrito de aceite a una sartén y añadimos las verduras troceadas. Le ponemos una pizca de sal y dejamos que se vaya rehogando a fuego medio-bajo.
Mientras se va rehogando, le vamos a quitar la carne a nuestros calabacines que teníamos reservados. Para ello, nos ayudamos de una cuchara. Gracias a los cortes que le hemos hecho es mucho más fácil vaciar los calabacines. La carne que le hemos quitado a los calabacines, la ponemos en un colador para que escurra todo el agua que tienen. A continuación, lo que le hemos quitado a los calabacines, lo picamos en trozos pequeños y lo ponemos en un colador para que escurran todo el agua que tienen.
Después, añadimos la carne de los calabacines a la sartén junto con el resto de verduras que teníamos pochando y dejamos que se sigan pochando.
Pasados unos minutos, añadimos la carne picada, yo estoy utilizando una mezcla de carne de cerdo y de ternera. Añadimos una pizca de pimienta y de sal. Vamos rehogando y desmigando la carne picada.
Ahora añadimos salsa de tomate… mezclamos todo bien y cuando ya está todo bien mezclado reservamos.
Ahora vamos a preparar la bechamel, para ello, en una cazuela añadimos un par de cucharadas de mantequilla y dejamos que se derrita, una vez derretida, añadimos 2 cucharadas de harina, y mezclamos todo bien durante uno o 2 minutos. Vamos añadiendo leche hasta conseguir una bechamel que no sea ni muy ligera ni muy espesa.
Ahora rellenamos los calabacines… vamos a ponerle una buena cantidad de relleno.
Después, ponemos bechamel por encima…
Espolvoreamos un poco de queso rallado por encima.
Por ultimo, gratinamos los calabacines hasta que cojan un bonito color dorado por encima.