Lavamos bien las verduras y las troceamos: las zanahorias en rodajas. La cebolla en brunoise. Ponemos un cazo con agua, llevamos a ebullición y sumergimos los tomates unos 30-40 segundos. Retiramos del fuego, pasamos por agua fría y pelamos. Picamos la col menudita.
Y empezamos ya: ponemos una cazuela agua fría y echamos la punta de jamón, el hueso de vacuno, la carne de vacuno y el trocito de tocino de cerdo ibérico. Calentamos y llevamos a ebulición. Cuando rompa a hervir, añadimos la col picada. Y la zanahoria. Pasados 10 minutos, añadiremos las patatas troceadas.
Añadimos el chorizo y la morcilla. Dejamos cocinar a fuego bajo unos 20 minutos más. Mientras, iremos preparando la salsa para rehogar el plato. Cogemos los tomates que teníamos pelados y los troceamos en cubitos pequeños. Agregamos una pizca de azúcar para quitar la acidez y mezclamos bien. Reservamos.
En una sartén, con un poco de aceite de oliva, salteamos la cebolla picadita. Cuando esté tierna, añadimos el ajo picadito. Rehogamos un par de minutos, removiendo con una cuchara de madera. Y añadimos el tomate picadito que teníamos reservado. Mezclamos bien los ingredientes. Añadimos un poco de perejil fresco picado.
Rehogamos unos minutos, removiendo de vez en cuando. Cuando esté listo el sofrito ( y con las coles ya en su punto), lo vertemos sobre las coles. Removemos bien para que se integren todos los alimentos. Agregamos una pizca de pimienta y probamos de sal. Dejaremos unos minutos al fuego... y listo! Para servir, separaremos la punta de jamón, la morcilla, el chorizo y la carne. Servimos calentito en un plato hondo.
Comentarios de los miembros:
Muy bueno