Precalentamos el horno a 200º o 180º si es con aire mientras pincelamos la base del molde con mantequilla y en mi caso un poco de azúcar moreno espolvoreada también. Reservamos. Tamizamos la harina junto con la levadura y la sal. Reservamos.
Ponemos en el vaso la mariposa, los 2 huevos, 4 min., temp. 37º, Vel. 3 1/2. Añadimos tres minutos más a la misma velocidad, pero sin temperatura.
Añadimos la mantequilla previamente fundida, la leche, el azúcar y la vainilla. Mezclamos a Vel. 2 1/2 mientras incorporamos la harina. Dejamos que mezcle durante unos minutos y terminamos mezclando con la espátula.
Pelamos las manzanas y las troceamos más o menos finas, según os guste más. Con una mandolina salen bastante bien, aunque en mi caso quedaban demasiado finas y opté por hacerlo como toda la vida.
Ponemos una capa de manzana en el molde, cubrimos con la crema, añadimos más manzana y volvemos a cubrir. Añadir más manzana para decorar si se quiere.
Metemos la tarta en el horno y la dejamos durante 30-35 min. a 200º o 180º si el horno es con aire.
Finalmente espolvoreamos la tarta con un poco de canela y pincelamos con un poco de mermelada de melocotón.