En un bol bastante grande, unimos las harinas, el azúcar, el cacao y el bicarbonato y combinamos bien con la espátula. En un bol pequeño disolvemos en el agua la esencia de vainilla, el sirope de chocolate o melaza y el vinagre. Añadimos lo líquido a lo sólido y con la espátula mezclamos bien hasta que no se vea nada de harina seca...aunque sin batir.
Engrasamos la cubeta de la FussionCook con ayuda de papel de cocina y vertemos la preparación. Seleccionamos la temperatura y el tiempo adecuados: en la FC nueva, con opción a variación de temperatura, lo ideal son 150 grados y 50-55 minutos de horneado. En la antigua, que es la mía, 45 minutos en Manual , que hornea a 180 grados.
Mientras el bizcocho se va haciendo, podemos preparar el relleno. En un bol mezclamos las cerezas confitadas cortaditas con la mermelada light. Una vez hecho el bizcocho a los 5 minutos ya lo podemos sacar con cuidado de la cubeta y untar con el relleno.
El mío ya he dicho que era muy raro...Helo aquí: Prepararemos ahora el merengue. En un bol perfectamente limpio y seco batiremos las claras con un poco de sal.
Cuando estén casi a punto de nieve dura iremos añadiendo gradualmente el azúcar, cucharada a cucharada, sin dejar de batir. Coronamos la tarta con merengue. Y doramos las puntas con el grill del horno...o con el horno de turbo convección, como he hecho yo:
El tiempo, unos minutos...máximo cuatro, a unos 180 grados. Se deja reposar la tarta hasta que esté casi fría y entonces ya se puede cortar. Se conserva perfectamente en el frigorífico un día...Si se conserva más tiempo no ha sido todavía comprobado...pues es una tarta que vuela
Comentarios de los miembros:
Ricaaaaaa