La cocina es una de las estancias del hogar que más energía consume, representando una parte importante del gasto energético total. Entre los electrodomésticos de alto consumo, las rutinas diarias de cocina y la iluminación, los costes pueden dispararse y dejar una huella notable en la factura mensual. Pero no te preocupes, porque con algunos cambios en los hábitos y estrategias concretas, es posible reducir el consumo sin renunciar a la comodidad ni a la funcionalidad de tu cocina.
Desde elegir electrodomésticos más eficientes hasta mejorar las técnicas de cocina o aprovechar al máximo la iluminación, existen muchas formas prácticas y sostenibles de ahorrar energía. Te invitamos a descubrir los mejores consejos para ahorrar energía en la cocina y de paso ahorrar en la factura de la luz.