Risotto de espinacas, queso de cabra y lacón ahumado
Risotto de espinacas, queso de cabra y lacón ahumado
No hay plato con el que quedes mejor que un risotto, es fácil de hacer y el resultado final siempre es bueno. Puedes aprovechar todas las sobras que tengas en la nevera.
Me gustó este risotto por su color y el sabor único que le aporta el queso de cabra, que por otro lado puedes sustituirlo por otro tipo de queso que se funda fácilmente al final de la cocción.
En un programa de televisión dedicado a la gastronomía italiana oí decir a unos chefs italianos que preparaban un risotto, que lo de añadir mantequilla y nata era una cosa de los franceses, el auténtico risotto no lo llevan. Yo no puedo decir ni que sí ni que no, porque ni idea. Cada cual que adapte las recetas a su gusto.
Ponemos las espinacas en un bol de cristal grande y lo metemos en el microondas tapado con la tapa del microondas o con film de cocina. A potencia alta lo dejamos durante 4 minutos, hasta que las espinacas reduzcan a la mitad.
Las volcamos a un robot de cocina y las trituramos. Se reserva.
En una olla de fondo grueso se pocha la cebolla y los ajos en 2 cucharadas de aceite de oliva, hasta que esté todo blandito.
Se añade el lacón cortado en tiritas y se sofríe.
Se agrega el vino blanco a fuego alto hasta que se evapore. Añadimos el arroz y se sofríe unos minutos.
Ya habremos hecho el caldo de verdura. Añadimos un cazo de caldo y damos vuelta para que el arroz suelte el almidón. A partir de aquí contaremos aproximadamente 25 minutos.
Una vez que el arroz ha absorbido el caldo, añadimos otro caldo. Y repetimos el proceso de dar vueltas hasta que ya no tengamos caldo. Otro cazo, repetimos.
El arroz debe quedar al punto, con un puntito duro en el centro del grano.
Antes de que esté el arroz listo añadimos las espinacas. Damos vuelta para integrar las espinacas en el arroz. Queda precioso con ese colorcito verde.
Una vez que están bien mezcladas, añadimos el queso troceado y sin la corteza ya que no funde. Damos vuelta para que se funda por todo el arroz.
Yo no añado mantequilla en este risotto porque queda suficientemente cremoso sin necesidad de añadir más grasa.